Se acepta la denominación universal de "peeling" a la técnica medinate la cual, se aplica en la pìel, previamente preparada, limpia y desengrasada, una solución, generalmente ácida, que provoca una descamación o "pelado" de un grosor específico de epidermis y en ocasiones, también de dermis superficial.

Hoy en día existen multitud de sustancias que se utilizan con esta finalidad y que, debido a sus propiedades, se aplican en distintas situaciones, patologías y tipos de piel.

Igualmente, podemos provocar peeling superficiales, medios o profundos según las necesidades.

Deben ser utilizados bajo control médico, tanto en su aplicación como en su frecuencia para evitar agresiones importantes, especialmente en los de alcance medio y profundo.

Es muy importante que la/el paciente sepa que tras un tratamiento con peeling debe proteger su piel con factores antisolares altos para evitar el daño de la radiación ultravioleta, que produce envejecimiento y manchas.

INDICACIONES:

• Rejuvenecimiento general de la piel: más firme, lisa, turgente y de color más sonrosado.
• Eliminación de signos de envejecimiento: manchas, pequeñas arrugas, falta de luminosidad, flacidez, etc.
• Melasma facial (paño de las embarazadas).
• Acné activo en sus distintas modalidades: pustuloso, comedoniano, mixto, etc.
• Marcas de acné.
• Cicatrices no fibrosas.
• Estrías y falta de firmeza en la piel (brazos, entrepierna, muslos, abdomen, etc.).
• Queratosis actínicas.
• Manchas de las manos y del escote

tratamientos asociados: Acné, Peeling